EL PODER DE LA MADRE - MUJER

El poder de la madre sobre su hijo y el cónyuge, a su vez, es energético y dominante.
La madre, a su antojo y en una esfera muy inconsciente domina sutilmente al niño para así atraer consigo al cónyuge, que él sin saber acepta por el anhelo de compartir.
Esta fuerza está usada ferozmente en muchos inconscientes colectivos entre los humanos.
En el mundo animal generalmente es más natural y más sano. La madre amamanta y enseña al bebé hasta que por sí solo sabe ser autosuficiente y ahí lo "abandona". No hay apego, no hay energias sutiles que siguen intentando controlar al pequeño, simplemente sigue el proceso de alejamiento sin obstáculos.
En el humano, en cambio, la madre puede usar estratégicamente la fuerza maternal del Amor para atraer hacia ella al amante y al niño inocente. Incluso menguando al padre / hombre de muchas cosas y usando, a su conveniencia, el entorno familiar.
Hay que ser consciente de esta realidad y evitar que el Amor se convierta en algo utilizable, dominante y controlado por la mente inconsciente de un poder sutil muy muy fino.
Hay que dejar que la naturaleza se regule dejando ser lo que es, un proceso de nacimiento del bebé y un posterior desapego por ambas partes, aun cubriendo las necesidades del niño si así lo necesita, pero siempre en partes iguales, ejerciendo una transparencia innata y no un dominio por parte de la mujer / madre incauta e inconsciente por las faltas que ella misma no ha cubierto e intenta solventar con ese niño o/y  con el hombre / padre.

Este es un ejemplo inconsciente de la  fuerza femenina, que utilizada conscientemente se convierte en una fuente inagotable de Amor incondicional y excepcional.

En casos extremos, hay familias separadas en las que la mujer / madre a través del dominio se lleva consigo a los niños, desejerciendo el padre su parte y así repitiéndose el proceso desequilibrado emocional de la familia entera implicada, sin ser ni conscientes de ello.
El padre empieza a tener falta de algo, sin saber de que ( falta de ejercer su amor / protección y esencia masculina).
La madre empieza a creer que tiene más, sin saber que al utilizar se está usando a sí misma inconscientemente y aunque su ego se acreciente, posteriormente cuando el niño sea adulto buscará esa falta intentando ejercer dominio sobre otros.
El niño quedará herido desde las mas profundas bases hasta si tiene la ocasión de ser consciente de la "artimaña" humana y aprende de la enseñanza familiar para no repetir el mismo patrón de comportamiento con sus semejantes.
Y, si no hay suerte de esta ocasión, vivir con la inconsciencia automática y repetir el patrón con sus venideros hijos, si los hay o con el entorno social más cercano.

K. NOVAU

Entradas populares de este blog

LA LIBERACIÓN DE BUSCAR CERTEZAS

LA VIDA Y LA MUERTE